He regresado de la primera etapa de mis vacaciones en la que he comprobado una vez más lo acertado de la frase de Samuel Johnson: “Cuando un hombre está cansado de Londres, está cansado de la vida, pues Londres tiene todo lo que la vida puede brindar”.
Antes de reanudarlas, repaso las noticias apresuradamente y me encuentro, entre otras cosas, con los comentarios sobre el resultado del “Debate sobre el estado de la Nación” y las consabidas encuestas sobre si ha ganado Zapatero o Rajoy. Al cansancio por la insistencia de los medios en reforzar el bipartidismo ignorando al número creciente de ciudadanos hastiado del mismo, se une esta vez un punto más de indignación por el afán en ocultar el dato significativo de que la intervención que más acuerdo suscitó fue la de Rosa Díez, la diputada de UPyD. Así se desprende del análisis de la encuesta del CIS que, en su página 14, refleja las respuestas a la pregunta sobre el grado de acuerdo con las distintas intervenciones. Tomo el párrafo que sigue del documento que hoy encuentro en la página de UPyD ( www.upyd.es) , basado en esa encuesta.
“EL DEBATE LO GANA ROSA DÍEZ, SEGUIDA DE LLAMAZARES, Y LO PIERDEN ZAPATERO Y RAJOY.
La tabla de acuerdo con las intervenciones de los líderes del E2482 del CIS (página 14), indica que las intervenciones más acertadas correspondieron a Rosa Díez. El 34,4% de los que siguieron su intervención, expresaron su acuerdo con los argumentos que utilizó, lo que da 5 un total de 5 millones de electores, a los que ha llegado positivamente la propuesta de UPyD.
El índice de rechazo (IR = respuestas positivas menos negativas), sitúa a Rosa Díez como la líder mejor aceptada por aquellos que siguieron las intervenciones”.
No me sorprende. Es una constatación más de que en torno al discurso de Estado de UPyD se puede seguir aglutinando un número creciente de ciudadanos de diversas procedencias ideológicas, pero la ocultación del dato es la prueba de lo difícil que seguirá siendo que se abra camino esta opción hasta lograr una mayoría significativa. Aunque la dificultad será, en todo caso, menor que la que supuso obtener el primero escaño, ese escaño despreciado por el presidente Zapatero en una muestra del talante soberbio que ahora sabemos se esconde tras el afable de que hace gala. Será menor porque fue, en cierto modo, insólito que 306.000 votantes actuaran contracorriente apoyando una opción nueva, considerándola más útil que el supuesto voto útil.
Mirada desde otra óptica, tal vez la salida de tono invita al optimismo, superado el primer momento de malestar por la poca talla política del presidente, porque indica que se pone nervioso ante la verdadera oposición. Pese a la Ley Electoral injusta, que ni PSOE ni PP han querido cambiar en el sentido de que el sistema electoral resulte verdaderamente proporcional, dando igual validez al voto de todos los ciudadanos, para que no ocurran cosas como que, con menos votos que UPyD, el PNV tenga seis escaños; pese a la escasez de medios y pese a todas las trabas, hoy las expectativas electorales de UPyD son notablemente más altas y lo serán aún más en 2012.